Cuando salimos de fiesta y vamos con nuestros amigos, puede que se nos pasen un poco las copas y terminemos borrachos o más felices de la cuenta. Llamamos a los ex, les decimos a todo el mundo que los amamos a pesar de que quizás ni los conoces, y apenas llegas a tu casa y tocas la almohada, te duermes en un segundo. Pero nada más que eso podría pasar cuando sales de fiesta ¿no?
» Hace 8 años