Dos expresidentes de ARENA han confesado que desviaron fondos públicos para ese partido político

El expresidente Antonio Saca, sus estructuras de campaña para la elección de 2004 y una decena de personas de su entorno cercano recibieron cheques de una cuenta del partido ARENA que, según la Fiscalía, se nutrió de un donativo de Taiwán a El Salvador por $10 millones de dólares. El dinero, entregado por Taiwán, debía destinarse a atender a las víctimas de los terremotos de 2001, pero se usó para financiar la campaña electoral de ARENA. Así lo confesó el ahora fallecido expresidente Francisco Flores en 2014 quien abiertamente dijo en juicio que el dinero había sido dado a sus destinatarios.

Juan Marco Flores, hijo del expresidente Francisco Flores, fue más allá y acusó en un video a miembros de ARENA de haber abandonado a su familia en momentos difíciles y les señaló que el dinero donado por Taiwán por los que su padre enfrentó juicio “siempre estuvo en ARENA, desde el principio, aunque ellos lo negaran”.

Cuatro años después el expresidente del último gobierno de ARENA, Tony Saca se declaró culpable de desviar más de $301 millones de las arcas del Estado y que parte de ese dinero fue a parar a cuentas del partido ARENA.

Uno de los coordinadores de fiscales de la Unidad de Investigación Financiera de la FGR, dijo al cierre del primer día juicio contra el expresidente Antonio Saca, 3 ex secretarios de la presidencia y 3 ex empleados del área financiera, que en la etapa de alegatos iniciales, “habían demostrado que $7,650,000 fueron desviados a un instituto político que fue el que se encargo de llevar al poder al señor Elías Antonio Saca entre el 2004 al 2009”.

Pese a que existen indicios claros que ARENA se benefició de la corrupción de sus expresidentes al Fiscalía aún no ha iniciado ningún proceso de investigación ni extinción de dominio para el partido político en mención.