Nueva Zelanda prevé levantar restricciones pese a amenaza por variante Ómicron


Nueva Zelanda pasa a un nuevo sistema de "semáforo" a partir del viernes que clasifica las regiones como rojas, naranjas o verdes.

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La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, dijo el lunes que el país pasará a un sistema de vida con el COVID19 a finales de esta semana, a pesar de que la nueva variante Omicron representa una nueva amenaza para la salud del mundo.

"Omicron es un recordatorio del riesgo que todavía existe en nuestras fronteras", dijo Ardern en la conferencia de prensa.

Nueva Zelanda tiene algunos de los controles fronterizos más estrictos del mundo y planea mantener las fronteras cerradas a la mayoría de los viajeros internacionales durante cinco meses más.

También introdujo nuevas medidas fronterizas para los viajeros de nueve naciones del sur de África durante el fin de semana, anunciando que solo los ciudadanos de estos países deberán permanecer en cuarentena estatal durante 14 días para ingresar al país.

Nueva Zelanda pasa a un nuevo sistema de "semáforo" a partir del viernes que clasifica las regiones como rojas, naranjas o verdes según su nivel de exposición al COVID-19 y las tasas de vacunación. Auckland, el epicentro del brote del Delta del país, comenzará en rojo, lo que hará que las máscaras faciales sean obligatorias y limite las reuniones en lugares públicos.